No son tus habilidades, tu status social, económico, familiar, tu belleza, tus virtudes, tu femineidad, tu sexto sentido, lo que te hace mujer. Es que Dios te hizo Simplemente mujer . Te dió el sexo con la capacidad para ser la mujer que Él ha querido que tú seas en la vida. Él te creó para grandes cosas y para alabanza de Su gloria.