Hace poco tiempo tuvimos el privilegio de tener en nuestro medio al conocido percusionista Alex Acuña. En una charla que pudimos tener con el durante algunos momentos libres entre sus conciertos charlábamos sobre una reiterada pregunta que suelen hacerle y es : ¿como un músico cristiano puede tocar en un ambiente tan pecaminoso como el lo hace?
Cualquiera que conoce algo de su trayectoria a nivel musical, sabe que ha tocado con gente como Luis Miguel, Sting, Michael Jackson, por nombrar algunos.
Ante tal pregunta, el, me empezó a nombrar como algo natural y con la humildad que lo caracteriza una interminable lista de muy conocidos músicos internacionales a los que el había llevado a Cristo o bien por lo menos había evangelizado. Me contó también como hace unos años el desarrollaba en su propia casa una reunión de adoración y estudio bíblico con algunas de estas figuras a las que el mismo había llevado a Cristo. Y me contó también como en esos pocos días que había estado en Argentina para tocar con un grupo de jazz, había tenido oportunidad de predicarle a todos sus compañeros. Realmente me dejo impacto con su animo de predicar a Cristo y de contar su testimonio a quien se le cruzaba por el camino. En cada concierto que toco se dio el lujo de decir que el llego a donde lego por el Cristo que había conocido, en cada clínica que da, trabaje para quien trabaje busca la oportunidad de dar testimonio de su fe.
Cuando miraba a este hombre, y se esmero y a la vez su sencillez para predicar, me preguntaba: ¿por que será que a los músicos, especialmente a los que están en el equipo de alabanza, nos cuesta tanto predicar el evangelio de Cristo? Aun mas; veo aveces que algunos grupos que dicen hacer música evangelista, sin embargo cuando bajan del escenario jamas le predican a nadie, nunca dedican el mas mínimo tiempo para compartir el evangelio.
En el primer caso, en el equipo de alabanza a veces esta la creencia de que como su ministerio es la adoración, no tiene ninguna necesidad de predicar el evangelio, y no hay cosa mas errónea que este pensamiento porque como decía alguien por ahí, si Dios lo único que quisiera de nosotros es que le adoremos, apenas nos salva, nos llevaría al cielo para que estemos con el por siempre en su presencia, pero si nos deja acá es con el único fin y gran privilegio de que prediquemos su mensaje, aun, cuando tu llamado sea a ministrar en la alabanza y adoración.
Por otro lado, los grupos que dicen usar la música para evangelizar pero se bajan de la plataforma y ni a sus vecinos le hablan de Cristo, muchas veces me hace pensar que solo utilizan el evangelismo como una excusa para poder subirse a un escenario y tener un tema que parezca santo pero su verdadero interés es solamente que la gente los escuche y no hay una verdadera pasión por las personas que se pierden sin Cristo. Se que no son todos lo conjuntos y no son todos los integrantes pero si somos realistas veremos que es una sincera y cruda realidad.
Pensando en todas estas realidades y hablando con Dios sobre ello, tuve una carga que luego comenzó a emocionarme muy gratamente, comencé a ver como los músicos cristianos, de muchos grupos, algunos evangelisticos otros de adoración aun algunos simplemente vocacionales pero todos los músicos cristianos comenzábamos a unirnos en un gran esfuerzo por evangelizar a otros músicos. ¿ Que mejor que esto? Músicos que evangelizan a otros músicos, después de todo hablamos el mismo idioma, estudiamos en las mismas escuelas, tenemos los mismas gustos y mil cosas mas que nos unen. ¿No será tiempo que empecemos a bajar, aunque sea de vez en cuando, de la nube de gloria para comenzar a unir esfuerzos y evangelizar por lo menos a quienes luego podrán colaborar en nuestros equipos de alabanza o bien en los conjuntos evangelisticos que tenemos? ¿No será cierto que Dios espera algo mas a que toquemos los domingos en la iglesia o que contemos algún testimonio cuando tenemos el recital de primavera?
Quizás podríamos asociarnos con este fin como lo hacen los atletas, los estudiantes universitarios, los uniformados, empresarios, y tantos otros grupos cristianos.
¿Te imaginas que glorioso será ver a esos músicos que hoy tocan y lo hacen bien pero bajo la influencia de la droga, llenos del poder y la gloria de aquel que es el creador e inspirador de la música? ¿ Podes ver a esos músicos que hoy son conocidos por su vida desordenada su adicción a la droga y al alcohol cuando estén por los medios contando su testimonio de cómo Cristo lo cambio?
Te animas a agarrar este sueño y hacerlo tuyo? ¿Te animas a poner tu tiempo y tu esfuerzo para comenzar a evangelizar a otros? Ya es hora que lo hagamos.
Si queres subirte a este tren podes hacerlo, es el momento preciso, comencemos ya. Comenza a orar sobre esto, unámonos, dejanos tu e-mail y tu comentario pronto comenzamos.
Los músicos también necesitan a Cristo!!