Ansiedades: Echarlas y no Cargar con Ellas

1 Pedro 5: 1-11

Por tanto, a los
ancianos entre vosotros, exhorto yo, anciano como ellos y testigo de
los padecimientos de Cristo, y también participante de la gloria que ha
de ser revelada: pastoread el rebaño de Dios entre vosotros, velando
por él, no por obligación, sino voluntariamente, como quiere Dios; no
por la avaricia del dinero, sino con sincero deseo; tampoco como
teniendo señorío sobre los que os han sido confiados, sino demostrando
ser ejemplos del rebaño.

 

Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores,
recibiréis la corona inmarcesible de gloria. Asimismo, vosotros los más
jóvenes, estad sujetos a los mayores; y todos, revestíos de humildad en
vuestro trato mutuo, porque DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS, PERO DA
GRACIA A LOS HUMILDES. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios,
para que El os exalte a su debido tiempo, echando toda vuestra ansiedad
sobre El, porque El tiene cuidado de vosotros. Sed de espíritu sobrio,
estad alerta. Vuestro adversario, el diablo, anda al acecho como león
rugiente, buscando a quien devorar. Pero resistidle firmes en la fe,
sabiendo que las mismas experiencias de sufrimiento se van cumpliendo
en vuestros hermanos en todo el mundo. Y después de que hayáis sufrido
un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, que os llamó a su gloria
eterna en Cristo, El mismo os perfeccionará, afirmará, fortalecerá y
establecerá. A El sea el dominio por los siglos de los siglos. Amén.

Lo opuesto a la confianza es el miedo o la ansiedad. No es sorprendente
entonces que Dios no solamente nos invite a tener confianza por Cristo
y su reino, sino también nos ayuda a liberarnos del miedo y la
ansiedad. Dándonos valentía y llevando nuestros miedos son dos formas
de hacer lo mismo.

El texto de hoy no es un llamado directo a la confianza. Es un llamado
a no estar ansiosos. Y de esta manera es un llamado indirecto a la
confianza y la valentía.

¿Existe Amenaza de la Humildad?

Pero hay algo muy inusual sobre este texto. La amenaza en este texto
que nos tienta a estar ansiosos no es explícitamente una prisión o
lesión o calumnia o saqueo de propiedades o pérdida de dinero. La
amenaza es la humildad. O para decirlo de otra forma, la razón por la
cual Pedro se encarga del problema de ansiedad se debe a que él está
manejando el problema de la humildad. De alguna forma la orden para
tener humildad hace la orden echar nuestra ansiedad a Dios más urgente,
más necesario.

El Flujo del Pensamiento de los Versículos 5-7

Note esto en el flujo del pensamiento de los versículos 5-7. El
capítulo empieza con una palabra para los ancianos de la iglesia para
pastorear el rebaño voluntariamente y con gusto y sin estar motivado
por el dinero. Luego el enfoque cambia a los demás miembros de la
iglesia.

Asimismo, vosotros los más jóvenes, estad sujetos a los
mayores; y todos, revestíos de humildad en vuestro trato mutuo, porque
DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS, PERO DA GRACIA A LOS HUMILDES. Humillaos,
pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que El os exalte a su debido
tiempo…

Ahora viene la relación entre este llamado a la humildad y el
mandamiento para echar todas sus ansiedades sobre Dios. La orden para
ser humildes parece aumentar la ansiedad y así Pedro la maneja.

La Puntuación de la Oración

La NIV y RSV ponen un punto final al final del versículo 6 y crea el
versículo 7 en una nueva oración. "Humillaos, pues. . . Echad todas
vuestras ansiedades sobre él." Pero esa pausa oscurece la conexión. El
NASB y KJV no tienen punto porque el versículo 7 no empieza una oración
nueva en el griego original. Esta es parte de la oración del versículo
6 y continúa con un participio: no, "Echad todas vuestras ansiedades
sobre él . . ," pero, " . . . echando todas vuestras ansiedades sobre
él."

"Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que El os exalte
a su debido tiempo, echando toda vuestra ansiedad sobre El, porque El
tiene cuidado de vosotros." No: "Humillaos vosotros mismos. Y echad
vuestra ansiedades." Sino: "Humillaos, pues,. . . echando toda vuestra
ansiedad."

Echar Tu Ansiedad sobre Dios es Parte de Humillarse

El punto es que echando su ansiedad sobre Dios, de alguna forma es
parte de la adquisición de humillarse . Echar tu ansiedad sobre Dios es
crucial si vas a humillarte bajo la mano de Dios con humildad hacia los
demás. Echar tu ansiedad sobre Dios no es algo separado que tu haces
después de humillarte. Es algo que tu haces para humillarte, o en el
proceso de humillarse.

Hay algo sobre humillarse debajo de la mano de Dios antes de otras
personas que hace necesario echar todas sus ansiedades sobre Dios. O
para decirlo de otra forma, hay algo sobre echar tu ansiedad sobre Dios
que lo hace posible humillarte debajo de Dios y antes de otras
personas.

Parece como si la humildad fuera una amenaza que causa ansiedad. Y si
vamos a ser humildes con Dios y con otros, debemos echar nuestra
ansiedad sobre Dios. Esta es la relación entre el versículo 7 y lo que
lo precede. "Revestíos de humildad en vuestro trato mutuoy humillaos,
pues, bajo la poderosa mano de Dios echando toda vuestra ansiedad sobre
El."

¿Por qué la Humildad Crea Ansiedad?

¿Pero por qué la humildad crea ansiedad? ¿Por qué la humildad requiere
valentía? ¿Por qué necesitamos que alguien elimine nuestra ansiedad
para poder ser humildes?

Puedes encontrar las respuestas fácilmente, simplemente si comienzes
pensar en algunos ejemplos de humildad. ¿Qué significa ser humilde?
Significa, que cuando cometas un error, lo admítas y digas lo siento.
Significa que cuando tu está débil o enfermo o no te sientes inadecuada
para una tarea, no seas demasiado orgulloso para pedir ayuda. Significa
hacer algunos trabajos ordinarios y pasar momentos con personas
ordinarias y no esperar elogios ni premios.

En otras palabras, en todas las formas de humildad existe el riesgo de
quedar mal. La humildad es el riesgo de no ser notado, no ser
apreciado, no ser elogiado ni ser premiado. La humildad implica el
riesgo obvio de ser despreciado.

Y ser despreciado duele. Ser ignorado o despreciado duele. Quedar mal
duele. Sentir humillado duele. Por lo tanto la humildad causa ansiedad.
Y la orden de ser humildes bajo Dios y revestirse de humildad hacia los
demás nos produce ansiedad.

Tenemos que Resolver este Problema de Ansiedad

De tal forma que si realmente vamos a ser humildes, tenemos que
resolver este problema de ansiedad. Si vamos a tener la valentía de la
humildad y la confianza de la modestia, alguien tiene que llevar
nuestra ansiedad de nosotros.

Este es el punto clave del versículo 7: "Sed humildes echando toda su
ansiedad sobre Dios." El secreto de la humildad es ser capaz de echar
tu ansiedad sobre Dios. Nota la conexión entre ser humildes bajo la
mano poderosa de Dios del versículo 6 y echar tu ansiedad sobre Dios
del versículo 7. Dios es el centro de ambos versículos y la conexión es
esta: antes de que pueda ser humilde bajo la mano poderosa de Dios,
tienes que poner tu ansiedad confidentemente en la mano poderosa de
Dios.

Existe cierta actitud temerosa bajo la mano poderosa de Dios para el
rebelde y el orgulloso. Pero eso no es a lo que Pedro nos llama en el
versículo 6. La humildad que Pedro nos ordena bajo la mano de Dios es
la humildad pacífica y confidente que se logra porque hemos eliminado
nuestra ansiedad sobre Dios con la confianza de que Él nos cuida.

Me gustan estas dos imágenes juntas: humillado y bajo la mano poderosa
de un Dios infinitamente sagrado y poderoso y confidente y pacífico
porque ese mismo Dios nos cuida y nos libera de la ansiedad. Antes de
que te arrodilles y pases bajo ante él, elimina la carga de tu ansiedad
sobre él!

¿Cómo Eliminas Tu la Ansiedad sobre Dios?

Ahora, ¿qué significa echar su ansiedad sobre Dios? ¿Cómo se puede lograr?

Obteniendo Ayuda de la Misma Palabra en Lucas 19:35

Esta palabra "echar" en el versículo 7 aparece varias otras veces en el
Nuevo Testamento—en Lucas 19:35, exactamente en la misma forma. Es
domingo de ramos y los discípulos han sido enviados a conseguir el
burro por Jesús montar. Luego el versículo 35 dice: "Y lo trajeron a
Jesús, y echando sus mantos sobre el pollino, pusieron a Jesús sobre
él."

De tal forma que el significado es sencillo y franco: si tu tienes
puesta un manto y quiere que un animal se la cargue, solamente tiene
que "echar" la prenda en el animal. De esta manera tu ya no necesitas
cargarlo. Porque está en el animal y no en ti. El burro trabaja por ti
y te libera de la carga.

Bien, Dios quiere cargar sus ansiedades de la misma forma que el burro
carga su equipaje. Uno de los aspectos más maravillosos sobre el Dios
de la Biblia es que él nos ordena que lo dejemos trabajar para nosotros
antes de ordenarnos trabajar para él. "Venid a mí, todos los que estáis
cansados y cargados, y yo os haré descansar" (Mateo 11:28). "Echa sobre
el SEÑOR tu carga, y El te sustentará" (Salmo 55:22). "Aun hasta
vuestra vejez, yo seré el mismo, y hasta vuestros años avanzados, yo os
sostendré. Yo lo he hecho, y yo os cargaré; yo os sostendré, y yo os
libraré" (Isaías 46:4). "Desde la antigüedad no habían escuchado ni
dado oídos, ni el ojo había visto a un Dios fuera de ti que obrara a
favor del que esperaba en El" (Isaías 64:4).

Dios quiere llevar la carga porque con esto demuestra su poder y lo
pone en una clase especial entre los denominados dioses del universo.
"Nadie ha visto a un Dios junto a ti, quien trabaja para los que lo
esperan". De tal forma echa los mantos de tu ansiedad sobre él. Él
quiere cargarlas.

Prácticamente, ¿Cómo Se Puede Hacer Eso?

Tu lo haces confiando de manera especial en la segunda parte del
versículo 7 con relación a su ansiedad específica. La primera parte del
versículo 7 dice, "…echando toda vuestra ansiedad sobre El…" y la
segunda parte del versículo dice: " . . porque El tiene cuidado de
vosotros."

Aquí es donde encontramos el punto que es muy aplicable. ¿Cómo
realmente transfieres tu la ansiedad de tu espalda a la espalda de
Dios? La respuesta es: Confíe en que él tiene cuidado de ti. Crea esta
promesa. Confíe en él. Es cuestión de la confianza práctica.

Esa promesa no queda en el aire. Está relacionada con una orden y la
promesa significa como mostrarte la forma de cumplir la orden. La orden
es, echa tu ansiedad sobre Dios. La promesa es, Dios tiene cuidado de
ti. Eso significa que él tiene cuidado por las cosas que te preocupan.
Él quiere que confíes en él por eso.

Pon una Ansiedad Específica en Dios

Pues a menudo confiamos en Dios con las cosas abstractas. Sí, él es un
Dios digno de confianza. Sí, él puede salvar a los pecadores en
general. Sí, el solucionará todo para mi bienestar en general.

Pero un texto como este significa, pon una ansiedad específica en Dios.
Confíe en él específicamente que él tiene cuidado de ello. Crea que él
es Dios. Su propósitos no pueden ser frustrados. "Yo sé que tú puedes
hacer todas las cosas, dice Job, y que ningún propósito tuyo puede ser
estorbado" (Job 42:2).

Cuando se dice que él tiene cuidado, significa que él no se quedará
inmóvil dejando que las cosas sucedan sin su influencia. Significa que
él actuará. Él trabajará. No siempre de la forma en que nosotros lo
haríamos. Él es Dios. Él ve miles de conexiones que nosotros no podemos
ver. Una tarjeta de crédito perdida quizás generaría una búsqueda lo
cual te alejaría de un programa de TV, que sin saberlo, te habría
puesto un deseo impuro en tu mente y te habría quitado la importancia a
la oración de tal forma que fallaras buscar el poder de Dios, perdiendo
así al día siguiente, una oportunidad de oro para hablar de Cristo a un
colega preparado, lo cual debido a esa tarjeta de crédito perdida tu no
hubieras perdido. Dios ve miles de conexiones que nosotros no vemos.

Poner tu ansiedad en Dios significa confiar en él para que maneje esta
situación específica. Si tu crees que él nos cuida (lo cual es lo que
la promesa dice) y crees que él es Dios, entonces tus miedos serán
levantados.

La Relación con la Oración

Hay otra cosa que hay que mencionar acerca de poner la ansiedad sobre
Dios, ésta es, la relación con la oración. Filipenses 4:6 dice, "Por
nada estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica
con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante
de Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará
vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús."

Por lo tanto Pedro 5:7 dice, "Echa toda vuestra ansiedad sobre El, por
medio de confiar que El tiene cuidado de vosotros." Y Filipenses 4:6
dice: "Echa toda vuestra ansiedad sobre El, por medio de ser dadas a
conocer vuestras peticiones delante de Dios." La relación es sencilla.
La confianza de que Dios cuida tu ansiedad es expresada en la oración.
La oración es la confianza vuelta hacia Dios y hablado.

Un Verano de Oportunidades… y Ansiedades

Pues nos llevará a nuestra nueva aventura de verano para la siguiente
hora de "orar la visión"—llevando lo que hemos visto de Dios y su
voluntad y convertirlo en oración.

Hemos venido hablando durante muchas semanas sobre la confianza, la
valentía y hacer los riesgos. Y estamos preparando un verano de
oportunidades para hacer eso—eventos deportivos, invitando a las
personas a la Puerta, equipos de encuestas, equipos de testigos de las
calles, encuentros sobre logros personales, ministerios del bar,
ministerio del drama. Cada vez que tu es humilde y amas a alguien así,
corres el riesgo de quedar mal. ¿Qué podemos hacer con esta amenaza
reiterada de ansiedad este verano?

Oraremos, todos los domingos en la mañana durante 12 semanas proximas,
45 minutos como extensión del servicio matutino. Y confiaremos en la
promesa de Dios—"Te cuido. . . Amo el evangelismo y cuando mi pueblo me
llaman juntos, depositaré en ellos el Espíritu de paz y poder."

Ideas para la Oración:

  • "Con la Acción de gracias" (Filipenses 4:6)—expresiones de
    elogio y agradecimiento porque Dios es soberano sobre nuestras
    ansiedades y nos cuida lo suficientemente para confiar totalmente en
    él.
  • Oraciones para la humildad y por más que el espíritu de Cristo que implica riesgos, servicio y humildad (Filipenses 2:3-8).
  • Oraciones por más fe en las promesas de Dios y desde cada obstáculo astringente para confiar con alegría será superado.
  • Oración
    para que Dios llame a las personas para todos los diferentes
    ministerios que hay en la lista; que echaremos nuestra ansiedad sobre
    Dios y oiremos nuestro llamado.
  • Ampliar las oraciones
    fuera a los ministerios de verano de otras iglesias y orar por la
    prosperidad del Reino de Dios de cada compañerismo donde Cristo está
    verdadero nombrado.
  • Ampliar las oraciones futuras para que
    haya valentía y humildad en las líneas frontales de las misiones del
    mundo y que este verano sea un período de avance del poder de Cristo y
    su reino en África, Asia, Europa, América del Sur y EEUU.


By John Piper. © Desiring God. Website: ministros.org

 

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