Tenemos un padre de misericordia, de paciencia, nos ha llenado de su amor, de bendiciones, ahora el Señor quiere que bendigas a tus padres, hazlo en vida.
1 Samuel 25:3 Y aquel varón se llamaba Nabal, y su mujer, Abigail. Era aquella mujer de buen entendimiento y de hermosa apariencia, pero el hombre era duro y de malas obras; y era del linaje de Caleb.
1 Samuel 25:32-35 Y dijo David a Abigail: Bendito sea Jehová Dios de Israel, que te envió para que hoy me encontrases. Y bendito sea tu razonamiento, y bendita tú, que me has estorbado hoy de ir a derramar sangre, y a vengarme por mi propia mano. Porque vive Jehová Dios de Israel que me ha defendido de hacerte mal, que si no te hubieras dado prisa en venir a mi encuentro, de aquí a mañana no le hubiera quedado con vida a Nabal ni un varón. Y recibió David de su mano lo que le había traído, y le dijo: Sube en paz a tu casa, y mira que he oído tu voz, y te he tenido respeto.
Esta es una historia que me impactó, esta historia es de una pareja de esposos, el esposo era muy adinerado, pueden verlo en el capítulo 25, tenía bastantes terrenos, propietario de 3,000 ovejas y cabras, tenía una esposa que se llamaba Abigail, él se llamaba Nabal, cuenta la historia que este hombre tenía que trasquilar a todas las ovejas, pero sus empleados no se dieron abasto y David, que todavía no era Rey, había mandado a sus siervos a servirle a este hombre porque toda esa mercancía o cantidad de ovejas corrían el riesgo de que fueran robadas. Estos siervos de David fueron a dar su servicio a Nabal cuando terminaron el trabajo tenían hambre y necesidad, David le dice a sus siervos que vayan con Nabal y le cuenten lo que habían hecho por él para que les diera de comer, pero Nabal trató muy mal a los siervos de David y él dice “cómo me vienen a decir que son siervos de David, hoy cualquiera puede inventarse eso, cómo puedo asegurarme de eso, no les daré nada” los siervos se fueron con David y le contaron lo que Nabal dijo y David era un hombre muy violento y se enojó tanto que dijo que iban a matar a Nabal y a toda su familia, estaba en ese enojo cuando se expresa de esa forma de Abigail, Abigail es una mujer muy inteligente y de hermosa apariencia, es la figura de lo que podemos hacer el día de hoy si nos ponemos a interceder a favor de alguien más, ella no sólo era preciosa sino actuó, ella escuchó que los siervos de David iban a matar a su esposo, la palabra dice que él era malo, de malas obras, cualquier mujer casada con hombre malo, sabe que quieren matarlo se puede decir “ahora es cuando” pero esta mujer no lo hizo así, ella actuó, agarró una ofrenda, agarró pan, vino, agarró, higo y lo presentó a David y le dijo “perdóname y perdona a mi esposo que ha actuado mal, no le hagas daño” y David escuchó sus palabras, recibió la ofrenda que Abigail había llevado, eso me impactó, la actitud, ella se puso a favor de Nabal, que no se lo merecía, pero se puso a favor de él.
1 Samuel 25:28-31 Y yo te ruego que perdones a tu sierva esta ofensa; pues Jehová de cierto hará casa estable a mi señor, por cuanto mi señor pelea las batallas de Jehová, y mal no se ha hallado en ti en tus días. Aunque alguien se haya levantado para perseguirte y atentar contra tu vida, con todo, la vida de mi señor será ligada en el haz de los que viven delante de Jehová tu Dios, y él arrojará la vida de tus enemigos como de en medio de la palma de una honda. Y acontecerá que cuando Jehová haga con mi señor conforme a todo el bien que ha hablado de ti, y te establezca por príncipe sobre Israel, entonces, señor mío, no tendrás motivo de pena ni remordimientos por haber derramado sangre sin causa, o por haberte vengado por ti mismo. Guárdese, pues, mi señor, y cuando Jehová haga bien a mi señor, acuérdate de tu sierva.
En pocas palabras Abigail le dijo a David: “no hagas tu propia justicia, espérate y que Jehová haga justicia sobre tus enemigos”. Ella es un ejemplo de intercesora, ella mencionaba la palabra de Dios y las promesas y las hacía recordar, si quieres presentarte delante del Señor tienes que recordarle tus promesas, ella le dijo “recuérdate que Jehová te pondrá por Rey y él hará justicia por ti”. David fue impactado por esas palabras. Imagínense, cuando uno está con un enojo lo menos que uno hace es escuchar, uno quiere sacar toda la ira, Dios le dio gracia a esta mujer, y le dio gracia delante de un hombre muy fuerte que era su esposo y también delante de David, futuro rey de Israel, esa es la autoridad que el Señor delega en nosotros cuando creemos en su palabra, cuando la aplicamos a nuestra vida. Las circunstancias pueden ser muy malas, pero aún así él puede darte la palabra para que puedas pelear en oración e intercesión.
Esta mujer fue reconocida en su razonamiento y la bendijo David, esa clase de bendición y razonamiento necesitamos las mujeres el día de hoy. Esa clase de entendimiento y razonamiento necesitamos las mujeres el día de hoy.
Necesitamos que las mujeres tengan esta clase de cualidades, necesitamos edificar nuestro hogar, necesitamos la gracia delante de las autoridades para hablar así, de nuestro esposo, de nuestro padre, de nuestro maestro, esta mujer fue usada para que no murieran todos, pero ella se fue de regreso con su esposo y cuando llegó su esposo estaba en un fiestín, ella no le habló, esperó a que le pasara la alegría y le habló hasta el día siguiente y cuando ella le contó lo que hizo, el esposo quedó duro como una piedra, ella estaba obedeciendo y a los 10 días el esposo murió.
David cuando vio lo que había acontecido con Nabal fue con Abigail y le pidió que fuera su esposa.
Esta mujer actuó y se presentó delante de las autoridades, se presentó con conocimiento, recordó a David lo que Dios le había prometido, se acercó con una ofrenda, no con las manos vacías, nosotros hoy necesitamos trabajar como equipo, las mujeres su parte y los hombres su parte, somos un equipo. La palabra es tan linda que podemos aplicarla en la necesidad del diario vivir.
Efesios 6:1-3 Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra
En los grupos de jóvenes y prejuveniles estos temas de la honra a padres se dan y me gusta cuando se preparan para enseñar a cómo honrar a los padres, honrar es tratar bien a alguien, expresarse bien de alguien, es darle honor, no sé si le has dado honor a tus padres o si te has expresado bien de él, es una buena oportunidad para hacerlo esta semana.
Yo me recuerdo que mi padre el día que falleció yo comenzaba a pastorear la iglesia junto con mi esposo y en el funeral yo lloraba y lloraba, todos muy amablemente me decían: “El está bien, está con el Señor, está en su presencia” muy amorosos, muy cariñosos conmigo, pero yo decía “yo sé” pero me está doliendo el desprenderme de él, quería más tiempo para honrarlo, él había tenido una vida desordenada, tenía problemas con el alcohol, él fue muy esforzado y proveyó a todos mis hermanos, talvez yo ya no alcancé tantas bendiciones como mis hermanos, pero quería honrarlo más. Le daba gracias a Dios por mi papá, por la oportunidad que le había dado de predicar su palabra, porque pudo sembrar amor y de ser salvo.
1 Timoteo 3:4-5 que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?
Bendice a mi padre terrenal, para que pueda gobernar bien su casa, tu palabra lo dice y yo lo quiero.
Salmo 128: 1-4 Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová, que anda en sus caminos. Cuando comieres el trabajo de tus manos, Bienaventurado serás, y te irá bien. Tu mujer será como vid que lleva fruto a los lados de tu casa; Tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa. He aquí que así será bendecido el hombre Que teme a Jehová.
Señor yo quiero que mi padre sea bienaventurado, te conoce, te suplico Señor que te pueda temer y sea constante, ayúdalo a que sea bienaventurado. Esa es una promesa y úsala cuando quieras bendecir a tu esposo, a tu padre o a cualquier hombre.
Salmo 127:3-5 He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre. Como saetas en mano del valiente, Así son los hijos habidos en la juventud. Bienaventurado el hombre que llenó su aljaba de ellos; No será avergonzado cuando hablare con los enemigos en la puerta.
Padres, el tener hijos es una bendición, nunca una maldición, nunca una carga, aquí dice que será una bendición para ti tan fuerte que cuando tus enemigos quieran hacerte daño no podrán, esta es otra palabra que puedes apropiarte para bendecir a tu padre.
Malaquías 4:6 El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición.
Con estos versículos estas armado para bendecir tu familia, si el Señor usó a Abigail de forma poderosa para interceder por su familia y esposo el Señor puede usarte a ti, doy gracias a Dios por la vida de mi padre, yo quiero verlo en el cielo, darle las gracias por lo que hizo por nosotros, le doy gracias a Dios por mi esposo, ha sido un buen padre, ha aparecido en el momento justo cuando más lo necesito, ha sido muy bueno, es una oportunidad más la que tenemos para poder bendecir a nuestros padres.
Usa uno de estos versículos para orar por tu padre. Tenemos un padre de misericordia, de paciencia, nos ha llenado de su amor, de bendiciones, ahora el Señor quiere que bendigas a tus padres, hazlo en vida.
Por: Pastora Sonia Luna