La omnipotencia de Dios
Tengo hijos y nietos, y quiero decirle esto: Si alguien quisiera hacerles daño o alejarlos de su familia y del amor de sus seres queridos y destruirlos, si yo pudiera hacer algo lo impediría.
¿Eso tiene sentido para usted? Si yo pudiera, evitaría que eso pasara. Pero yo soy tan sólo un ser humano y no tengo todo el poder para evitarlo, pero Dios sí puede hacerla porque él es todopoderoso.
«Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien según su grande misericordia nos ha hecho nacer de nuevo para una esperanza viva por medio de la resurrección de Jesucristo de entre los muertos; para una herencia incorruptible, incontaminable e inmarchitable, reservada en los cielos para vosotros» (1 Pedro 1:3, 4).
Amigo, hay un tesoro reservado en la gloria para usted que los abogados no pueden tomar, la inflación no puede tocar, ni el diente roedor del tiempo, ni la descomposición pueden destruir. Está allí. Esa es su herencia. El versículo 5 dice: «que sois guardados por el poder de Dios…».
Usted es guardado por el poder de Dios. No es porque usted se aferra; es porque él lo sostiene a usted. La gente dice: «Sólo ore para que yo me mantenga fiel hasta el fin».
Bien, debemos orar los unos por los otros para ser cristianos fieles, pero no se trata de sostenernos nosotros mismos, es él el que nos sostiene. Jesús dijo: «Yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, y nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las ha dado, es mayor que todos; y nadie las puede arrebatar de las manos del Padre» (Juan 10:28, 29). ¿Puede imaginarse un poder tan fuerte como para que pueda arrebatarlo a usted de las manos de Dios?
Algunas personas dicen: »Yo creo que el diablo puede alejarnos de Dios». ¡Ah! ¿Usted cree eso? ¿Cree que el diablo lo puede alejar de Dios? Bien, entonces, si pudiera, ¿por qué no lo tiene él a usted? Piense al respecto.
¿No ha sido bueno el diablo con usted? Él tiene el poder, pero simplemente no lo ha hecho. Ahora, esa es una doctrina extraña ¿verdad? Ir al cielo por la bondad del diablo. ¡No, no, no! Usted va al cielo por la gracia de Dios, y la única razón por la que el diablo no lo ha arrebatado de las manos de Dios es simplemente porque no puede.
«Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen. Yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, y nadie las arrebatará de mi mano [nadie puede hacerlo]» (Juan 10:27,28).
El poder de Dios nos guarda. Nunca crea que por estar eternamente seguro, no importa la manera como usted viva. Dios corregirá esa teoría en un instante disciplinándolo. «Porque el Señor disciplina al que ama…» (Hebreos 12:6). Eso una insensatez asumir que esta es una licencia para pecar.
Yo peco todo lo que quiera Algunas personas dicen: «Sí, yo creo en la seguridad eterna, sencillamente puedo ser salvo y pecar todo lo que quiera». Yo peco más de lo que quiero. Yo no quiero pecar. Nada me agradaría más que saber que no volvería a hacerla. Uno de estos días, cuando Dios haya terminado conmigo no volveré a pecar, cuando él me haya glorificado.
Y si usted aún desea pecar, entoncesnecesita arreglar sus cuentas con el Señor. Necesita nacer de nuevo. «…si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas (2 Corintios 5:17)». Hay razones extraídas directamente de la Biblia para que usted pueda saber que está eternamente seguro.
Recuerde que ser salvo es estupendo. Pero es aún mejor ser salvo y saber que lo es, y todavía es más maravilloso saber que es salvo, estar seguro de que lo es y saber que nunca perderá su salvación.
Tomado del Libro «Lo Que Cada Cristiano debe Conocer» del Dr. Adrian Rogers