PRÉDICA CRISTIANA / SERMÓN / ARTÍCULO CRISTIANO
La conquista de Canaán es el acontecimiento bíblico más representativo, y simboliza como se deben conquistar las bendiciones de Dios. Esto parece enseñarnos que, algunas de las bendiciones prometidas por Dios no son automáticas, sino que tienen que ser conquistadas por nosotros. La tierra de Canaán no fue dada al pueblo de Israel así nada más, sino que tuvo que ser tomada «a la fuerza». Fue por medio de la guerra, que Israel fue conquistando la bendición prometida por Dios a sus antepasados. Esto hace preguntarnos:
¿Si Canaán era una tierra prometida, por qué Israel tuvo que conquistarla a través de la guerra?
¿Acaso Dios no debió de entregarles la tierra sin ningún tipo de contratiempo?
¿Qué principios espirituales podemos aprender de la conquista de Canaán?
«Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad perpetua; y seré el Dios de ellos»
Génesis 17:8 (RV60)
LA TIERRA DE CANAÁN ERA UNA PROMESA | LA BENDICIÓN PROMETIDA
Canaán es una zona territorial que Dios prometió dar a Abraham para que habitara su descendencia (Gén.12:7; 13:15; 15:18; 17:8). Esta promesa fue hecha por Dios a Abraham unos cuatrocientos años antes de su cumplimiento (Gén.15:13). Fue la promesa de habitar en esta tierra, la que brindó esperanzas al pueblo de Israel cuando se encontraba en Egipto (Gén.50:24; Éx.3:8; 6:3-4). La tierra de Canaán representaba una patria, es decir un hogar permanente para un pueblo que tenía un gran historial de peregrinación desde sus inicios.
«También establecí mi pacto con ellos, de darles la tierra de Canaán, la tierra en que fueron forasteros, y en la cual habitaron».
Éxodo 6:4 (RV60)
¿Quiénes eran los habitantes de la Tierra de Canaán?
Antes que Israel habitara Canaán, esta región fue habitada por pueblos descendientes de Canaán, hijo de Cam, nieto de Noé (Gén.10:15-20). Estos pueblos estaban dispersados por todo el territorio, y generalmente se le llamaban “cananeos”, aunque estaban distribuidos por clanes o familias. Sin embargo, todos estos pueblos tenían algo en común, y eran sus prácticas abominables, las cuales fueron rechazadas por Dios (Lv.18:24-29; Dt.9:5). Por tal razón, Dios decidió echar a los cananeos de aquella tierra, y que no cohabitaran con los hijos de Israel (Éx.23:31-33; 33:2). Así mismo, Dios advirtió a los israelitas que se cuidaran de imitar las acciones de aquellos pueblos, evitando ponerlas en práctica (Lv.20:23; Dt.12:29-33).
¿Cómo era la tierra de Canaán? Haz click aquí 👇
https://www.ministros.org/tierra-prometida-la-bendicion-despues-del-desierto/
«Y fue el territorio de los cananeos desde Sidón, en dirección a Gerar, hasta Gaza; y en dirección de Sodoma, Gomorra, Adma y Zeboim, hasta Lasa»
Génesis 10:19 (RV60)
TIERRA PROMETIDA: ¿CÓMO SE FUE CONQUISTANDO LA BENDICIÓN?
En múltiples ocasiones Dios les dijo a los israelitas que se preparasen a conquistar la tierra que les había prometido. La conquista no era sólo entrar a la tierra y tomarla, sino que implicaba una serie de instrucciones detalladas para su éxito. Estas instrucciones iban a garantizar que toda la tierra fuese tomada, y que los cananeos no fuesen una amenaza para el futuro de la nación.
«..todo lo tomaron en guerra»
Josué 11:19 (RV60)
1- La Tierra de Canaán iba a ser tomada mediante la guerra | Josué 11:19
Cuando el pueblo de Israel entró a conquistar la tierra prometida, tenían orden de parte de Dios de destruir por completo a los cananeos (Dt.20:17). Este juicio divino fue debido a las abominaciones cometidas por ellos durante todo el tiempo que habitaron la tierra (Dt.20:18). Aunque realmente era Dios quien iba a arrojar esas naciones de la tierra, Israel era el instrumento para ejecutar esta acción (Éx.34:24). Esto significaba que Israel no debía jactarse creyendo que era por su justicia, sino por la impiedad cananea era que Dios los echaba fuera (Dt.9:4-5).
La bendición prometida a Israel iba ser obtenida mediante la guerra, por ello tenían que batallar hasta que la tierra estuviese bajo su dominio total. El libro de Josué describe que los israelitas tomaron la tierra a la fuerza (Jos.11:19). Esto demuestra que los cananeos presentaron oposición haciendo frente a los israelitas durante la conquista, llegando incluso a dificultar que fuesen arrojados (Jos.15:63; 17:12,18; Jue.1:19). Podemos aprender que aunque poseer la tierra era una bendición prometida, los israelitas la tenían que conseguir conquistándola como guerreros.
«Poco a poco los echaré delante de ti…»
Éxodo 23:30 (RV60)
2- La Tierra de Canaán iba a ser tomada gradualmente | Poco a Poco
Así como la tierra prometida sería tomada a la fuerza, también Dios les dijo que la iban a tomar poco a poco (Éx.23:30; Dt.7:22). Esta forma gradual de conquista era para evitar que la tierra quedara despoblada y el número de animales salvajes creciera desmedidamente y les hicieran daño. Dios conocía las consecuencias naturales que habría si los cananeos eran arrojados rápidamente de la tierra. También la nación de Israel necesitaba conocer la guerra (Jue.3:2), y aprender a confiar en las promesas de Dios condicionadas a la obediencia.
La conquista gradual nos enseña un maravilloso principio espiritual, y es que la bendición prometida por Dios ocurre de forma progresiva. Muchas de las bendiciones que Dios tiene para su pueblo, irán llegando poco a poco, para ir creciendo y madurando durante el proceso. La conquista poco a poco, permitía ir de batalla en batalla, aprendiendo como Dios ayudaría a su pueblo en cada enfrentamiento. Solo de esta forma el pueblo afirmaría su fe y confianza en Dios, y demostraría su obediencia a sus mandamientos.
«…la guerra se hace con buena estrategia»
Proverbios 20:18 (DHH)
LA CONQUISTA DE CANAÁN FUE UNA CONQUISTA ESTRATÉGICA
Cuando el pueblo de Israel iba a entrar a conquistar Canaán, tuvo que contar con diversas estrategias dadas por Dios. “Jehová es varón de guerra” es uno de los calificativos con el cual el Dios de Israel se dio a conocer ante su pueblo (Éx.15:3). Esto colocaba a Dios como un estratega militar dispuesto a guiar a su pueblo a la victoria. Dios mismo se apareció a Josué cuando se encontraba frente a Jericó para guiarles y darles las instrucciones para la conquista (Jos.5:13-15).
a) Generar temor en los cananeos | Señales y Prodigios
La historia de que Dios había hecho secar las aguas del Mar Rojo, y la victoria sobre los reyes amorreos generaron temor en los cananeos. Este temor fue descrito por Rahab la ramera a los espías enviados por Josué a Jericó (Jos.2:9-11). Así mismo, los cananeos que habitaban al occidente del Jordán, desmayaron su corazón cuando oyeron que Dios había secado las aguas del río (Jos.5:1). La estrategia de atemorizar al enemigo, haría que el corazón de los cananeos estuviese sin aliento y con ánimos decaídos para enfrentarlos. A través de señales y prodigios, Dios demostró que estaba con su pueblo para otorgarle la bendición prometida de la tierra.
b) Conquistando Jericó | Dividiendo la Tierra
Jericó era la ciudad más fortificada y estaba ubicada estratégicamente en el centro de toda la tierra de Canaán. La estrategia de atacar Jericó inicialmente, generaría temor en los otros pueblos y colocaba a Israel en una mejor posición de ataque. Los muros de Jericó eran altos y su anchura era tal que habían casas construidas en ellos (Jos.2:15). Cuando los demás reyes cananeos oyeron la destrucción de Jericó, sintieron gran temor (Jos.9:3; 10:2). Sin duda, la invasión a Jericó fue el gran paso para la conquista estratégica de la tierra de Canaán.
La toma de Jericó preparó el camino para la conquista del centro del territorio de Canaán. Las conquistas de las ciudades de Hai y Gabaón, hicieron que la tierra quedara dividida en dos para facilitar su invasión (Jos.caps 8-9). Cada ciudad conquistada brindaba confianza al pueblo de Israel, así como fortalecía su fe para el siguiente paso. No debemos dejar de pensar que era Dios quien guiaba al pueblo y peleaba sus batallas a fin de obtener la bendición prometida.
c) La Campaña del Sur | Josué Cap.10
La conquista de la parte central de Canaán preparó el terreno para la conquista del territorio sur de la tierra. Los reyes amorreos hicieron alianza con los demás reyes del sur para enfrentarse a Israel (Jos.10:3-5). Una vez más Dios estableció las estrategias para conquistar el territorio, y a través de actos prodigiosos le dio la victoria de esta zona (Jos.10:8-43). La conquista del sur brindó a los israelitas la posesión de la mayor parte del territorio, dejando en aislamiento a los pueblos cananeos del norte. Sin lugar a dudas, podemos ver la mano divina aplicando estrategias para la conquista de la bendición prometida.
d) La Conquista del Norte | Josué Cap.11
Los reyes del norte de Canaán hicieron alianza, reuniendo sus fuerzas junto a las aguas de Merom a fin de atacar a Israel (Jos.11:5). Nuevamente Dios le dio la estrategia de batalla a Josué, entregando a los enemigos en sus manos (Jos.11:7-15). La conquista de esta parte del territorio, fue considerada como la culminación de la campaña militar de Israel a la tierra prometida.
Aunque algunos pueblos continuaron resistiéndose durante algunos años, la mayoría del territorio se encontraba bajo el dominio de Israel (Jos.11:16-23). La frase “queda aún mucha tierra que poseer” (Jos.13:1), describe completamente que Israel se encontraba en una continua conquista por la bendición prometida. Esto quiere decir, que aunque seamos bendecidos por Dios, siempre habrá nuevos desafíos por conquistar.
«sino que los destruirás completamente… como Jehová tu Dios te ha mandado»
Deuteronomio 20:17
LA CONQUISTA DE CANAÁN TENÍA QUE SER TOTAL
A pesar de que Dios había dicho a Israel que debían destruir y arrojar completamente a los pueblos cananeos, ellos no hicieron esto totalmente (Sal.106:34-35). La conquista debía ser total, esto implicaba desarraigar toda presencia e influencia cananea de aquella tierra. No arrojar a los cananeos de la tierra prometida, traería amargas consecuencias a los israelitas (Núm.33:55-56; Jos.23:13).
En algunos casos los cananeos hicieron resistencia dificultando su expulsión del territorio (Jos.15:63; 17:12; Jue.1:19,21). En otros casos los israelitas prefirieron dejarlos en la tierra haciéndolos tributarios (Jos.16:10; 17:13; Jue.1:27-33, 35). Por no haber arrojado a todos los cananeos de aquella tierra, los israelitas cayeron en sus prácticas idolátricas y abominables. Esto causó desagrado a los ojos de Dios, quien dejó a los cananeos para probar a Israel (Jue.2:21-23).
Esto nos enseña que la conquista por la bendición prometida debe ser total. Israel cayó en la tentación de sentirse cómodo con la conquista, al preferir cobrarles impuestos a los cananeos en vez de sacarlos de la tierra. Aquellos pueblos que se hicieron resistentes, los dejaron con la condición de sacarles un beneficio. El problema era que los cananeos estaban allí, y su presencia les afectaría durante muchos años, influyendo en su destino como nación.
CONCLUSIÓN
En definitiva la conquista de Canaán nos enseña grandes principios y lecciones espirituales. La bendición prometida a Israel representa espiritualmente las bendiciones que Dios tiene para nosotros. Esas bendiciones serán otorgadas solo bajo la condición de la conquista, luchando por ellas a toda costa. Muchas veces la lucha será contra el diablo y otras veces contra nosotros mismos. No podemos ceder territorio si hallamos resistencia, sino que tenemos que seguir adelante en la conquista.
Muchos cuestionan la idea de que Dios aplique estrategias para obtener victorias o conquistar las bendiciones, argumentando que Dios no tiene necesidad de hacer eso. Sin embargo, aunque Dios es Todopoderoso y Omnisciente, Él mismo reconoce nuestra humanidad entendiendo que el hombre va aprendiendo y madurando gradualmente. A través de las estrategias, los hombres entienden que solo siguiendo el plan trazado por Dios les ha de garantizar el éxito y la victoria.
Prepárate a conquistar tu bendición prometida!!!
Dios te bendiga!!!
Te invito a leer 👉 https://www.reflexiones.cristianas.com/compromiso-la-clave-para-triunfar-reflexion-de-vida.html
Por Alexander Guerrero